¿Qué es el amor?
Hablar del amor es como intentar
poner puertas al campo. Es un concepto que no necesita de explicación cuando se
conoce y solo en una palabra abarca una graduación tendente a infinito de algo
que no se puede clasificar.
Complejo y no sé hasta qué punto
irracional es el amor cuando entra en conexión con la componente sexual. El castellano es una lengua bastante rica,
pero sorprende como para algo tan extenso como es el amor solo encontramos una
única palabra. La RAE da numerosas acepciones a la palabra amor siendo sus
primeras cuatro acepciones las siguientes:
1. m. Sentimiento intenso del ser humano
que, partiendo de su propia insuficiencia, necesita y busca el encuentro y
unión con otro ser.
2. m. Sentimiento hacia otra persona que naturalmente nos atrae y que, procurando reciprocidad en el deseo de unión, nos completa, alegra y da energía para convivir, comunicarnos y crear.
3. m. Sentimiento de afecto, inclinación y entrega a alguien o algo.
4. m. Tendencia a la unión sexual.
2. m. Sentimiento hacia otra persona que naturalmente nos atrae y que, procurando reciprocidad en el deseo de unión, nos completa, alegra y da energía para convivir, comunicarnos y crear.
3. m. Sentimiento de afecto, inclinación y entrega a alguien o algo.
4. m. Tendencia a la unión sexual.
Lo cierto es que si te detienes a
reflexionar sobre el contenido de estas acepciones podrías sacar las siguientes
máximas:
1º. El amor es un sentimiento
intenso y natural de atracción hacia otra persona que nos completa y nos da
ganas de vivir.
2º. Parte del estado incompleto del
ser, procura completarse por la reciprocidad en el deseo a la unión, con la
entrega y el afecto.
3º. La máxima expresión del amor
se alcanza en conjunto con la unión sexual.
¿Y qué es la amistad? ¿Es acaso
la hermana pobre del amor? Si nos quedamos con las primeras dos máximas
anteriores podríamos hablar de amistad verdadera y entonces ¿Cuál sería la
diferencia del amor? Yo entiendo que donde hay amor hay también amistad, pero
nunca a la inversa, y la diferencia radica en que la amistad es altruista y el
amor es egoísta. El amor va más allá y trasciende, siendo algo prácticamente inexplicable.
Cuando se habla de necesidad ¿es
realmente una necesidad el amor? Si consideramos que el amor es una
consecuencia de estar vivo, negar el amor sería negar la vida y por tanto nos
encontraríamos ante una disfunción de la persona, un muerto en vida.
Son muchas las clases de amor que
se han intentado clasificar a lo largo de los siglos, pero eso no es realmente
amor. Culturalmente yo distingo el amor de otras dos versiones menores, que no
son amor pero forman parte de él:
-
Cariño: es el peldaño anterior al amor. Sientes
que la persona te completa y te preocupas ella.
-
Afecto: el nivel más bajo, que solo implica la
inclinación positiva hacia el otro.
El amor posiblemente ha rellenado
más hojas en la historia que ninguna otra materia. Desde el punto de vista
científico también ha sido objeto de estudio. La explicación biológica vendría
a decirnos que el amor solo responde a nuestra programación genética, el
instinto, para garantizar la supervivencia de la especie y del individuo.
Al hablar de la especie,
vertiente altruista, volveríamos sobre
los pasos del ciclo de la vida: nacer, crecer, reproducirse y morir; y al
hablar del individuo, vertiente egoísta, lo haríamos del completarse. En
conjunto tendríamos la vida del ser, porque de la unión de ambos se aprecia la
perpetuación de la rueda que gira sin fin, desde el punto de vista científico.
Pero hablar desde esta perspectiva es un reduccionismo puro, en tanto que puede
haber unión sexual en base a la atracción física, producirse procreación, pero
no haber amor por ninguna parte.
Si entramos en un terreno más
avanzado, el de la psicología, nos encontramos con la teoría triangular del
amor de Robert Sternberg, que describe el amor como una relación interpersonal
cimentada en tres pilares:
- - La intimidad: el conjunto de sentimientos
compartidos por la pareja que en base a la confianza y la reciprocidad promueven
el acercamiento y permiten la unión.
- - La pasión: es la necesidad de la unión con el
otro, con la componente del deseo sexual y romántico y la excitación
psicológica.
- - El compromiso: la decisión de amar a la otra
persona a corto plazo y planificar conjuntamente a largo plazo. Luchar por
mantener ese amor, tanto en los buenos como en los malos momentos.
En base a esta trinidad el autor
entiende distintas clases de amor dependiendo de si cuentan o no con uno de los
pilares, considerando que el amor consolidado, el más difícil de alcanzar y
mantener, es aquel que cuenta con intimidad, pasión y compromiso. ¿Y porque no
agregar la empatía? La identificación con el otro va más allá de la intimidad y
la pasión pues vendría a ser el auténtico sentimiento de ser completado ¿y la
confianza? ¿Es lo mismo hablar de confianza que de intimidad? ¿Por qué no
hablar de desnudez? ¿No sería el amor verdadero una auténtica fusión de seres
tanto a nivel mental como puramente biológico?
El amor es una energía que solo
sabes que está, pero no la entiendes. Se
habla de mariposas en el estómago, del corazón desbocado. Solo sabes que está
pero no lo entiendes. Es una energía que te hace sentir bien, estar feliz,
pleno. Te preocupas por otra persona, quieres su bien y lo pasas mal si ella
también lo pasa. Es la complicidad, la empatía, las ganas de estar junto a
ella. Hace que te muevas, que intentes superarte y dar lo mejor de ti. En
definitiva, solo sé que no sé.
Como decía al principio, para mí
el hablar de amor es como intentar poner puertas al campo. Intenté buscarle una
explicación pero me doy cuenta de que es inexplicable. Comencé a escribir esta
entrada, con un título de lo más pretencioso, para intentar darle forma y
nombre a algo que no lo tiene, y creo que no he fallado. Solo sé que cuando es de verdad, está más allá
de la capacidad de describir y explicar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario